Mi madre quedó viuda a sus 32 años.
Nunca se volvió a casar.
Pocos años de morir, a sus 70, ella un día me confiesa, que había un señor mayor que le resultaba interesante.
En el bar me lo marca con la mirada.
Era un señor que vivía en el barrio, también por los 70, bien llevados, siempre...